El viento soplaba hacia el este. Ella siempre buscaba ir en contra de la dirección del viento, así evitaría ser sorprendida por los susurros de malas conversaciones y revueltas que siempre arrastraba en el aire. Saber eso facilitaría su búsqueda, aunque no gano nada con engañarme.
Ahora sé lo que debí hacer en vez de contarle todo. Debí seguir con la conversación, era un día soleado y estábamos frente al mar. No había pasto más verde en la escarpada; No había llanto más solemne que su mirada. La verdad muchas veces se viste con los atuendos más ridículos y no la podemos reconocer por incrédulos y escépticos. Aquella vez que la vi partir era una de esas. Pero la comprendo, resultaría imposible creerme.
Estos ojos que no son mios la vieron irse un 13 de julio, o bien, aproximadamente 28 horas. Mi espíritu, lo único que realmente poseo, empezó a morir justo el mismo día. No era coincidencia.
¿Qué era lo que se iba con ella? Mi desesperado intento por aferrarme a la vida, a una vida normal. Ahora, la conciencia me palpita, las sombras de la tarde me aprisionan al igual que este cuerpo, la fatiga me seduce a dormir y sigo errante, sin rumbo. Esta vez no, no cerraré los ojos y no entraré en sueño. Por que cada sueño es un viaje y cada viaje una nueva vida que tengo que descubrir y que dejar al anochecer.
Los hechos son los siguientes: He llegado a este cuerpo, de un hombre de apróximadamente 26 años, alto y calvo.. Al parecer ha cometido un delito que aún no he descubierto. He conocido a Mila, que ha sido amiga de este personaje en el que ahora estoy involucrado desde hace unos años, y me he enamorado de ella.
Mis párpados ya no aguantarán por más tiempo; pero sé qué es lo que tengo que hacer así despierte como miembro de una tribu en Australia o como el guitarrista de la banda más influyente de hoy. De aquí en adelante ésta será mi búsqueda.
El anterior fue como un episodio piloto de una serie de ficción (e incluso ciencia ficción) que pretende recrear la historia del hombre de los mil nombres. Famoso en tanto a que su condición era muy particular y misterioso por la incertidumbre de los hechos. Se decía de él en ciertas webs de noticias y se debatía su existencia en foros de discusión.
El hombre de los mil nombres era sólo sustancia, ya que cada vez que despertaba se veía dentro de otro cuerpo. Nadie nunca ha sabido lo que le sucedía a la persona que se veía ultrajada, sin embargo varios hospitales atestiguaron y dieron cuenta de numerosos casos de pérdida de memoria en pacientes con síntomas de convulsión. Uno de los mitos más sobresalientes de las últimas décadas.
Ahora sé lo que debí hacer en vez de contarle todo. Debí seguir con la conversación, era un día soleado y estábamos frente al mar. No había pasto más verde en la escarpada; No había llanto más solemne que su mirada. La verdad muchas veces se viste con los atuendos más ridículos y no la podemos reconocer por incrédulos y escépticos. Aquella vez que la vi partir era una de esas. Pero la comprendo, resultaría imposible creerme.
Estos ojos que no son mios la vieron irse un 13 de julio, o bien, aproximadamente 28 horas. Mi espíritu, lo único que realmente poseo, empezó a morir justo el mismo día. No era coincidencia.
¿Qué era lo que se iba con ella? Mi desesperado intento por aferrarme a la vida, a una vida normal. Ahora, la conciencia me palpita, las sombras de la tarde me aprisionan al igual que este cuerpo, la fatiga me seduce a dormir y sigo errante, sin rumbo. Esta vez no, no cerraré los ojos y no entraré en sueño. Por que cada sueño es un viaje y cada viaje una nueva vida que tengo que descubrir y que dejar al anochecer.
Los hechos son los siguientes: He llegado a este cuerpo, de un hombre de apróximadamente 26 años, alto y calvo.. Al parecer ha cometido un delito que aún no he descubierto. He conocido a Mila, que ha sido amiga de este personaje en el que ahora estoy involucrado desde hace unos años, y me he enamorado de ella.
Mis párpados ya no aguantarán por más tiempo; pero sé qué es lo que tengo que hacer así despierte como miembro de una tribu en Australia o como el guitarrista de la banda más influyente de hoy. De aquí en adelante ésta será mi búsqueda.
El anterior fue como un episodio piloto de una serie de ficción (e incluso ciencia ficción) que pretende recrear la historia del hombre de los mil nombres. Famoso en tanto a que su condición era muy particular y misterioso por la incertidumbre de los hechos. Se decía de él en ciertas webs de noticias y se debatía su existencia en foros de discusión.
El hombre de los mil nombres era sólo sustancia, ya que cada vez que despertaba se veía dentro de otro cuerpo. Nadie nunca ha sabido lo que le sucedía a la persona que se veía ultrajada, sin embargo varios hospitales atestiguaron y dieron cuenta de numerosos casos de pérdida de memoria en pacientes con síntomas de convulsión. Uno de los mitos más sobresalientes de las últimas décadas.
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